Para conocer a fondo la localidad, es imprescindible recorrer sus alrededores y descubrir los vestigios de las actividades tradicionales que desempeñaban sus habitantes, como los lagares o bodegas, las antiguas minas de cobre y el magnífico pozo de hielo. Al igual que muchas poblaciones de la Comarca de las Cinco Villas, la villa contaba con un nevero, conocido localmente como pozo de hielo. Este edificio formaba parte de la denominada «Arquitectura del Hielo», destinado a la conservación de hielo y nieve.
Durante el invierno, los vecinos recolectaban hielo de las balsas y nieve, almacenándolos en el interior del pozo, intercalados con capas de paja que servían como aislante, para poder disponer de hielo durante el resto del año. Esta actividad era fundamental para la economía local, involucrando el comercio, el transporte y la venta de hielo, regulados por normas estrictas. Aunque muchos de estos pozos han desaparecido con el avance de la tecnología, en algunas localidades se han conservado y restaurado.
En este caso particular, el pozo de hielo se encuentra al norte de la localidad, en una ladera al salir del núcleo urbano en dirección a la Ermita de Miramonte. Aunque ha perdido su cubierta, las labores de limpieza han realzado su valor, y se puede afirmar que es uno de los más grandes de la zona.
Puedes descargar también la información de la ruta en pdf accesible en el enlace
Otros puntos de la ruta accesible con Audio-Signoguías en Piedratajada:
Más información sobre la ruta accesible con Audio-Signoguías en Comarca de las Cinco Villas de Zaragoza, haciendo clic en el enlace.
Audio-signoguía realizada por Equalitas Accesibilidad para Comarca Cinco Villas.